¿Son falsas las fotos del telescopio James Webb?
En
julio, la NASA publicó las primeras imágenes enviadas por el telescopio
espacial James Webb. Las fotografías destacaron el gran potencial del
instrumento para explorar los secretos del espacio profundo, y sorprendieron a
todo el mundo por sus espectaculares galaxias y estrellas a todo color.
Sin
embargo, a los pocos días se empezó a dudar de la “veracidad” de las fotos.
¿Son reales los colores de las nebulosas y constelaciones o están coloreadas de
manera artificial? La NASA explicó que sí, que las fotos son reales pero aclaró
que las imágenes compartidas están tratadas con filtros especiales.
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galaxia que parece de ciencia ficción
Por
supuesto que las imágenes enviadas por el James Webb y compartidas con el mundo
por la NASA son reales. Pero eso no significa que las estemos viendo tal cuál
el telescopio las captó y cómo los científicos las recibieron.
El James Webb está diseñado con instrumentos
científicos y diferentes filtros que lo hacen sensible a la luz que los humanos
no podemos ver.
Klaus
Pontoppidan, científico del proyecto Webb, explico qué: “Cuando se obtienen los
datos enviados por el telescopio, no se parecen en nada a una bella imagen en
color”. Por razones bastante simples y de sentido común, los ingenieros de Webb
tuvieron que manipular mucho las imágenes que vimos antes de publicarlas. De
otra manera no se “vería nada” y ni se entenderían.
Esto es así porque el telescopio “ve en rojo”.
Justamente, su función es detectar la luz infrarroja, la más débil y lejana del
cosmos y observa radiación térmica: ve otra parte del espectro electromagnético
que el ojo humano no tiene la capacidad de observar. Básicamente, las fotos
enviadas por el Webb son los más parecido a una imagen monocromática.
Una
vez tomadas las fotos, los datos en bruto viajan a la Tierra desde un millón de
kilómetros de distancia en el espacio a través de ondas de radio. Este sistema
es el más confiable, pero es lento: la velocidad de recepción es de solo un par
de megabits por segundo (2 Mbps).
Procesar
los datos y convertirlos en alguna de las espectaculares fotos a color les
lleva a los científicos un par de semanas.
Alyssa
Pagan, desarrolladora de visuales científicos en el STScI -Space Telescope
Science Institute-, explicó que: “Normalmente, el proceso desde los datos
brutos del telescopio hasta la imagen final, limpia, que comunica la
información científica sobre el universo, puede llevar desde semanas hasta un
mes”.
¿Las
imágenes enviadas por James Webb son reales o fake?
Las
imágenes son reales pero están coloreadas por los científicos. O mejor dicho,
están reinterpretadas. Los ingenieros toman las imágenes del Webb utilizando
hasta 29 filtros diferentes, cada uno de los cuales detecta diferentes
longitudes de onda de luz infrarroja.
Así,
a través de estos filtros, el telescopio detecta fuentes de luz débiles junto a
otras muy brillantes. El resultado no es una “foto a color”, sino una imagen
monocromática.
Una
vez recibidos estos datos, los científicos asignan a la luz recogida por cada
filtro un color diferente, desde el rojo (que tiene la mayor longitud de onda)
hasta el azul (que tiene la menor longitud de onda). Finalmente, con este
método, crean una imagen compuesta a todo color.
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