El Ártico ya es el basurero de plástico de todo el planeta
Un proyecto de ciencia ciudadana llevado a cabo por
el Instituto Alfred Wegener (AWI) ha revelado que los residuos plásticos que
flotan en el remoto Océano Ártico proceden de todo el mundo. «En 2016 empezamos
a trabajar con los ciudadanos para investigar la composición de los residuos
plásticos en las costas del Ártico», explica en un comunicado la investigadora
del AWI, la doctora Melanie Bergmann, a quien se le ocurrió la idea del
proyecto junto con la guía turística y escritora Birgit Lutz.
En estrecha colaboración con empresas que ofrecen
viajes al Ártico, los turistas participantes recogieron y registraron los
residuos plásticos arrastrados a las costas de Svalbard. Entre 2016 y 2021, se
recogieron 23.000 objetos con un peso total de 1.620 kilogramos. «Ahora hemos
ido un paso más allá y hemos investigado de dónde procedían los desechos que
aún tenían marcas, etiquetas o huellas», explica Bergmann. «Nuestro análisis
reveló que, en un 80%, la clara mayoría eran restos de plástico», añade la
primera autora, Anna Natalie Meyer, del AWI.
Aunque la mayoría de los artículos podían
clasificarse como procedentes de la pesca, no se pudo identificar su punto de
origen. En aproximadamente el uno por ciento de los desechos aún podían
reconocerse etiquetas o huellas, principalmente de países árticos, sobre todo
Rusia y Noruega. «Por estudios
anteriores y modelos informáticos, sabemos que la contaminación plástica
procede tanto de fuentes locales como remotas», afirma Meyer. «A nivel local,
los desechos plásticos llegan al océano procedentes de barcos y de comunidades
árticas con sistemas deficientes de gestión de residuos. En cuanto a las
fuentes remotas, los desechos plásticos y los microplásticos son transportados
al Océano Ártico desde el Atlántico, el Mar del Norte y el Pacífico Norte por
diversos ríos y corrientes oceánicas.»
Por ejemplo, los expertos llegaron a encontrar en
las costas de Svalbard residuos procedentes de fuentes tan distantes como
Brasil, China y Estados Unidos. Pero los residuos plásticos procedentes de
Europa, especialmente de Alemania, también acabaron en el Ártico, representando
el ocho por ciento del total. «Teniendo en cuenta que Alemania es el ‘campeón
europeo’ tanto en producción de plástico como en exportación de residuos, este
porcentaje comparativamente alto no es tan sorprendente», afirma Melanie Bergmann.
Según el estudio, la comparación de los nuevos datos
con los de anteriores trabajos de campo realizados en la superficie del mar y
en los fondos oceánicos muestra que en las costas del Ártico se acumulan muchos
más residuos, lo que las convierte en una especie de sumidero final. Estos
desechos plásticos plantean retos adicionales a los ecosistemas árticos, que ya
están sobrecargados por el cambio climático. Después de todo, el Ártico se está
calentando cuatro veces más que la media mundial.
«Nuestros resultados ponen de manifiesto que incluso
los países industrializados prósperos, que pueden permitirse una mejor gestión
de los residuos, contribuyen de forma significativa a la contaminación de
ecosistemas remotos como el Ártico», afirma Melanie Bergmann, experta del AWI.
«En consecuencia, para abordar el problema con eficacia, no sólo es necesario
mejorar la gestión local de los residuos (especialmente en los barcos y en las
pesquerías). Es igualmente importante que la producción mundial de plástico se
reduzca de forma masiva, especialmente en los países industrializados de
Europa, Norteamérica y Asia, ya que aproximadamente el 11% de la producción
mundial de plástico llega a nuestros cursos de agua. Esto subraya una vez más
la necesidad urgente de un Tratado de las Naciones Unidas sobre los Plásticos
ambicioso y jurídicamente vinculante, que se está negociando actualmente y que
debería entrar en vigor en 2024″, explicó.
..
Comentarios
Publicar un comentario