Las arañas viudas marrones se comen a las viudas negras

 

Si te digo que pienses en una araña venenosa, probablemente una imagen de la célebre viuda negra se forme en tu cabeza. Estos arácnidos de aspecto amenazante, con cuerpo negro y el rojo intenso presente en el abdomen, tienen un veneno muy poderoso. Su picadura contiene latrotoxina, una poderosa neurotoxina que puede provocar dolor muscular intenso, calambres abdominales, hiperhidrosis e incluso taquicardia. Sin embargo, pese a la fama que tienen, es raro que una Viuda Negra acabe con la vida de un ser humano.

Las viudas negras siempre se han considerado animales muy peligrosos, pero no son para nada agresivas. Son una especie bastante tímida, que no ataca a no ser que se sienta amenazada o tenga la necesidad de cazar.

Sin embargo, en los últimos años los científicos se han percatado en una caída en la población de viudas negras en sus hábitats naturales de EEUU y Latinoamérica, sobre todo en los entornos urbanos. En algunas zonas directamente han desaparecido, y aunque de momento no es una especie que se consideren en peligro de extinción, la escasez de ejemplares en ciertos territorios ha alertado a los científicos. En un estudio reciente, un equipo de científicos ha encontrado la razón por la que las viudas negras están desapareciendo, y es por culpa de las viudas marrones.

Estas arañas forman parte de la familia de la viuda negra, pero no son nativas de los mismos territorios. Hasta hace unos años se encontraban localizadas en zonas de África Central, Asia o Australia, pero con el tiempo han ido expandiéndose hacia el continente americano, donde conviven ahora con sus "primas", las viudas negras. Las viudas marrones no tienen un veneno tan poderoso, pero sí son mucho más agresivas. Y lo que es más importante, llegan antes a la madurez reproductiva y sus ciclos de crecimiento son más rápidos.

Un equipo de científicos del Centro de Investigación sobre Especies Invasivas de Riverside llevó a cabo un experimento cuando empezó a sospechar que las viudas marrones podrían estar detrás del declive de población de las viudas negras, y los resultados fueron muy reveladores. Cuando pusieron frente a frente a especímenes adultos de las dos especies, un 40% de las veces las viudas marrones mataban y se comían a las viudas negras. Un 30% de los encuentros acabaron con victoria de las viudas negras, pero actuando en defensa propia y el 30% restante lo conforman las veces en las que las dos arañas coexistieron sin conflicto.

Pero el experimento que reveló el problema fue siguiente, cuando enfrentaron a dos ejemplares subadultos. Las viudas marrones más jóvenes son implacables, y mataron y devoraron a las viudas negras un 80% de las veces. Los estudios determinaron que los ataques no se deben a disputas territoriales o a escasez de comida, es un instinto asesino de las viudas marrones que las empuja a acabar con la competencia.

Por el momento los responsables del Centro de Investigación sobre Especies Invasivas descartan hablar de las viudas marrones como "especie invasora", pero advierten del peligro que los ejemplares más jóvenes pueden tener sobre la población global de viudas negras en EEUU.

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