Nuestros mensajes enviados al espacio tardarán 400 años en ser respondidos (si son respondidos)
El universo en permanente expansión esconde unos
100.000 millones de galaxias, cada una de las cuales alberga un número similar
de estrellas sobre las que, como mínimo, se sabe que orbita un planeta.
Entonces, ¿por qué todavía no hemos contactado con ninguna civilización
extraterrestre? Los astrónomos llevan décadas ideando modos de identificar y
comunicarse con vida inteligente más allá de la Tierra, hasta ahora sin éxito.
Algunos expertos habían concluido que es posible que no estemos buscando bien.
Recientemente, una nueva investigación arroja otra hipótesis: no han tenido
suficiente tiempo.
A veces las mejores teorías más imaginativas tienen
lugar en los momentos más insospechados. Eso mismo le ocurrió a Enrico Fermi en
el verano de 1950. El físico estaba pasando el día junto a unos colegas, cuando
empezaron a comentar una noticia que hablaba de unos ovnis que superaban la
velocidad de la luz. A raíz de ahí, plantearon la cuestión sobre la posibilidad
de que existan otras civilizaciones inteligentes en la nuestra galaxia, lo que
dio lugar a una paradoja, conocida como ‘la paradoja de Fermi’, basada en las
siguientes premisas:
En la
Vía Láctea hay miles de millones de estrellas similares al Sol
Existen
muchas posibilidades de que alguna de esas estrellas tengan planetas similares
a la Tierra en su zona habitable.
Muchas
de esas estrellas, y, por tanto, de sus planetas, son mucho más antiguas que el
Sol, con lo que es probable que alberguen planetas similares al nuestro que
puedan haber desarrollado vida inteligente hace mucho tiempo.
Incluso
al ritmo lento de los viajes interestatales, la Vía Láctea podría recorrerse en
pocos millones de años.
Dado
que muchas de las estrellas similares al Sol tienen miles de millones de años
más que nuestra estrella, por pura probabilidad la Tierra ya debería haber sido
visitada por alguna civilización extraterrestre.
Teniendo en cuenta todas estas variables, “¿dónde
está todo el mundo?”, concluyó Fermi. Esta misma paradoja sirvió de punto de
partida para toda clase de elucubraciones y estudios sobre la existencia o no
de vida inteligente más allá de la Tierra, una hipótesis que, a pesar de no
haber sido demostrada, jamás ha sido descartada totalmente por la comunidad
cientifica. Es posible que los extraterrestres hayan visitado la Tierra en el pasado,
mucho antes de que la aparición de los humanos, o sencillamente antes de que
hayamos tenido la capacidad de dejar alguna prueba que sirva de testimonio de
su paso por nuestro planeta. Otra posibilidad es que estas hipotéticas
civilizaciones todavía no hayan desarrollado la tecnología suficiente para
contactar con nosotros, o, más probablemente, que seamos nosotros los que
todavía no estemos suficientemente desarrollados para contactar con ellos.
Es posible
que nos hayan contactado en el pasado, o que todavía no hayan podido hacerlo
con nuestra tecnología
Esa última
hipótesis es la defendida por Amri Wandel, astrofísico de la Universidad Hebrea
de Jerusalén, autor de un artículo publicado en diciembre de 2022 por la
revista Astrophisical Journal. Según el experto, si es verdad que la vida ha
evolucionado en muchos planetas de nuestra galaxia, es probable que las
civilizaciones más avanzadas no solo busquen signos de vida, sino también
inteligencia. En otras palabras, es posible que no hayamos demostrado, al menos
todavía, que somos un planeta lo suficientemente avanzado como para aparecer en
sus objetivos de búsqueda.
..
Comentarios
Publicar un comentario