El protocolo del ejército español ante un avistamiento OVNI

 

En España, un piloto de combate sigue un protocolo estricto cuando se le ordena despegar en una misión de scramble (despegue rápido de emergencia) para investigar un Objeto Volador No Identificado (OVNI). Aunque los avistamientos de OVNI son raros y generalmente se explican por fenómenos naturales o actividades humanas, las fuerzas aéreas de todo el mundo mantienen procedimientos para investigar estos incidentes de manera profesional.

El 23 de febrero de 1995, un piloto del Escuadrón 211 de Morón de la Frontera (Sevilla) regresaba de una misión cuando vio un objeto volante mientras realizaba un vuelo a baja altitud. El objeto, descrito como ovalado y gris claro, estaba inicialmente estacionario, pero aceleró a gran velocidad en dirección opuesta y desapareció de su vista.

Las investigaciones posteriores revelaron:

• El contacto radar con el objeto era intermitente debido a la baja altitud del avión.

• No se detectaron otros contactos en la zona.

• La orografía del terreno dificultaba la visibilidad a esa altura.

• La Guardia Civil no tenía registros de ningún evento similar en la zona.

• Un matrimonio local informó un avistamiento similar, pero no coincidía en fecha ni ubicación con el del piloto.

• La cúpula del avión del piloto tenía microfracturas que podían haber causado reflejos o distorsiones visuales.

• En el mismo momento del avistamiento, la Vuelta Ciclista a Andalucía se desarrollaba en la zona con varios helicópteros sobrevolando.

El piloto, debido a las microfracturas en la cúpula de su avión, pudo haber confundido uno de los helicópteros de la Vuelta Ciclista con un objeto extraño. Esta explicación fue corroborada por el General Segundo Jefe y Jefe del Estado Mayor del MAEST.

Pero hay muchas preguntas abiertas como: ¿Es posible que las microfracturas en la cúpula hayan amplificado un reflejo normal, creando la ilusión de un objeto acelerando? ¿Hubo otros testigos del avistamiento que no se informaron? ¿Se han realizado estudios posteriores sobre las microfracturas en las cúpulas de los aviones militares y su impacto en la percepción visual de los pilotos?

Cuando se detecta un OVNI o se informa de un avistamiento inusual en el espacio aéreo español, se activa un protocolo de respuesta rápida. El personal de control de tráfico aéreo alerta a la base aérea más cercana con cazas de combate listos para despegar inmediatamente. Una vez que se da la orden de scramble, los pilotos se preparan rápidamente para despegar.

El piloto de combate seguirá un procedimiento estándar que incluye:

1. Verificación de la información: Antes de despegar, el piloto recibe la información relevante sobre el avistamiento de OVNI, incluida la ubicación, altitud, velocidad y cualquier otro detalle disponible.

2. Preparación de la aeronave: El piloto verifica que la aeronave esté en condiciones de vuelo y lista para la misión. Se asegura de que todos los sistemas estén funcionando correctamente y de que tiene suficiente combustible para la misión.

3. Comunicación: Durante todo el vuelo, el piloto mantiene una comunicación constante con el control de tráfico aéreo y otros pilotos involucrados en la misión.

4. Identificación visual: Una vez en el aire, el piloto intentará localizar visualmente el objeto en cuestión y determinar su naturaleza. Se pueden utilizar sistemas de radar y otros equipos de aviónica para recopilar más información.

5. Informe y seguimiento: Una vez que se completa la misión, el piloto informa de sus observaciones al control de tráfico aéreo y a las autoridades pertinentes. Se seguirá un proceso de seguimiento y análisis para determinar la naturaleza del avistamiento.

Es importante destacar que la misión de un piloto de combate en un scramble tras un avistamiento de OVNI tiene como objetivo principal garantizar la seguridad del espacio aéreo y descartar cualquier amenaza potencial. A menudo, los avistamientos de OVNI tienen explicaciones convencionales, pero es fundamental investigar cada incidente de manera profesional y metódica.

Los informes sobre avistamientos de OVNI y las investigaciones llevadas a cabo por las fuerzas armadas suelen considerarse secretos por varias razones:

1. Seguridad nacional: En muchos países, la información relacionada con la defensa nacional y la seguridad aérea se clasifica para proteger las capacidades y procedimientos militares. Los informes de avistamientos de OVNI pueden contener detalles sobre el rendimiento de aeronaves militares, radares, sistemas de armas, o información sensible que podría ser explotada por actores hostiles.

2. Protección de fuentes y métodos: Los informes de avistamientos de OVNI pueden revelar fuentes de inteligencia o métodos de vigilancia utilizados por las fuerzas armadas, lo que podría comprometer su efectividad y poner en riesgo la seguridad de los operativos y la integridad de las operaciones.

3. Evitar pánico o desinformación: En algunos casos, los informes de avistamientos de OVNI se mantienen en secreto para evitar la difusión de información no verificada que pueda generar pánico en la población o provocar desinformación. Las autoridades prefieren investigar en privado para determinar la naturaleza de los avistamientos antes de hacer declaraciones públicas.

4. Política y relaciones internacionales: La divulgación de información sobre avistamientos de OVNI puede tener implicaciones políticas y diplomáticas significativas, especialmente si involucra aeronaves o tecnología de otros países. La revelación prematura de estos informes podría afectar las relaciones internacionales y la cooperación en materia de defensa.

Los informes sobre avistamientos de OVNI suelen mantenerse en secreto por razones de seguridad nacional, protección de fuentes y métodos, prevención de pánico o desinformación, y consideraciones políticas y diplomáticas. Sin embargo, en los últimos años ha habido un mayor interés en la desclasificación de estos archivos para fomentar la transparencia y la discusión abierta sobre el tema.

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