La inteligencia artificial comienza a leer las emociones humanas… y empatiza con ellas

 

La realidad supera la ficción una vez más y Hume, la inteligencia artificial que sabe leer tus emociones, está aquí para demostrarlo. Y es que este avance de la tecnología de máquinas parece sacado de una historia de ciencia ficción, pero se trata de la nueva propuesta, originaria de Estados Unidos, para identificar y reaccionar a un esquema de emociones y sentimientos de carácter humano.

En realidad, Hume había comenzado sus pruebas hace ya un año, pero no es hasta ahora que ya se permite su uso general al público (de hecho, lo puedes probar de forma gratuita en el sitio webdemo.hume.ai), ya que en este tiempo se ha perfeccionado su programación y algoritmo para aprender mejor cómo identificar una emoción humana y cómo reaccionar a ella. Estas son algunas de las herramientas mediante las cuales identifica las emociones de los usuarios que se acercan a ella:

Reconocimiento de más de veinte patrones de tono, volumen y altura de voz de una persona y vinculación de estos con significados complejos.

Identificación de expresiones como risa, suspiros, muletillas y más y vinculación de estos con emociones como sorpresa, felicidad, confusión, etc.

Lectura de expresiones físicas de una gama de casi 30 unidades de posibilidades que expresan emociones de acuerdo a la postura, los gestos y movimientos corporales.

Reconocimiento de expresiones mediante el rostro y sus movimientos, centrado en las expresiones faciales determinadas en los ojos, boca, nariz y más.

Por la forma en que funciona, casi parece que Hume reconoce mejor las emociones humanas que muchas personas que no han ido a terapia… Además, consigue hacerlo en tiempo real, con breves conversaciones (necesitas tener cámara y micrófono activo), ya que puede ir cambiando sus respuestas conforme la conversación avanza. Es decir, en un principio quizá entras al sitio web con incredulidad, algo que la inteligencia artificial reconocerá, pero si de pronto te genera sorpresa, los colores de su mapa emocional cambiarán y verás esa nueva emoción en la pantalla.

Por si fuera poco que Hume puede reconocer más de 24 expresiones emocionales distintas, también es capaz de usar esta información para responder de forma consecuente, es decir, con empatía. Esto lo hace mediante su nueva API conversacional, que se llama Hume EVI (EVI son las siglas de Empathetic Voice Interface, que significa Interfaz de Voz Empática). Así, si la inteligencia artificial detecta que estás triste, se dirigirá a ti con un tono de compasión, mientras que si nota que estás enojado, buscará calma. Lo mejor de todo es que tú puedes ver en tiempo real cómo identifica las emociones que sientes, quizá incluso mejor que tú mismo, y notarás cómo cambia la conversación a partir de ellas. Y claro, esta IA también cuenta con ese lenguaje tan casual que distingue al resto de ofertas en la gama y que ayudan a sentir conexión con ellas.

 

Por ejemplo, las apps para tener relaciones de pareja con inteligencia artificial también saben dirigirse a ti con atención y cuidado, pero si a esto sumamos el potencial de herramientas como Hume, pronto tendremos auténticas relaciones afectivas con máquinas, tal cual lo pronosticaba la película Her.

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