La Estación Espacial Internacional está en grave peligro
La Estación
Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés), que acaba de acoger a
la cápsula de SpaceX que traerá de vuelta a casa a los astronautas varados de
Starliner, tiene los días contados. La NASA planea que esta se acabe
destruyendo contra la atmósfera de la Tierra a partir de 2030, aunque esta
misión se podría adelantar. Y es que la agencia espacial estadounidense ha
detectado un aumento den la tasa de fugas de aire en varios módulos que ponen
en peligro a la estación.
La NASA ha
publicado un nuevo informe en el que ha dado a conocer que ha detectado que las
fugas de aire en la Estación Espacial Internacional han alcanzado un punto
crítico, con tasas de filtración "a su nivel más alto". Un problema
que se ha encontrado en varios módulos, pero donde es particularmente grave en
la sección rusa; y que supone un importante riesgo de seguridad para integridad
de la ISS. Esta situación ha obligado a la agencia estadounidense y a
Roscosmos, la agencia espacial rusa, a trabajar en conjunto para identificar
las áreas más vulnerables.
Incluso están
trabajando en encontrar soluciones a este problema. La fuga, que se encuentra
dentro de un túnel que conecta con una estación de acoplamiento, ha sido
monitorizada desde el año 2019 y fue señalada en documentos oficiales en 2021.
Sin embargo, ahora la NASA ha identificado "un aumento en la tasa de
fuga" desde febrero de este año. El organismo señala en su informe que
"la causa raíz de la fuga sigue siendo desconocida"
El informe también
indica que tanto la NASA como Roscosmos "están trabajando juntas para
abordar los problemas estructurales con el túnel de transferencia del módulo de
servicio ruso" y "han limitado su atención a las soldaduras internas
y externas en este momento". Incluso se señala que la agencia espacial
rusa "confía en que podrán controlar y cerrar la escotilla del módulo de
servicio antes de que la tasa de fugas alcance un nivel insostenible".
Sin embargo, el
mismo informe se recoge que "la NASA y Roscosmos no han llegado a un
acuerdo sobre el punto en el que la tasa de fugas es insostenible". En el
peor de los casos, si la fuga empeora aún más, el sector ruso se podría ver
obligado a cerrar de forma permanente el área de la escotilla alrededor de las
fugas, dejando su sección con sólo tres puntos de acoplamiento en la estación
espacial. Aun así el problema parece lejos de arreglarse.
Y es que el informe
detalla que, desde el mes de agosto de este año, el riesgo de fuga del túnel de
transferencia del módulo de servicio ha pasado a puntuarse como "5 de
5"; que es el más grave de la escala de puntuación de riesgo de la NASA,
que se basta en la probabilidad de que ocurra un riesgo potencial. Por lo
tanto, la ISS podría tener su final más cerca de lo que se esperaba.
--
Comentarios
Publicar un comentario