Hallan un pez caracol que sobrevive sin congelarse en el Ártico

 

Este diminuto pez caracol que brilla intensamente puede sobrevivir en el Ártico gracias a un elemento muy especial.

Una especie de pez diminuto, el pez caracol abigarrado (Liparis gibbus), vive en las aguas heladas de Groenlandia. Increíblemente, puede evitar congelarse y sobrevivir en estas temperaturas bajo cero al producir proteínas anticongelantes dentro de su cuerpo.

Los científicos conocen este tipo de proteínas anticongelantes desde la década de 1970. Pero según un nuevo estudio, el pez caracol se lleva las palmas cuando se trata de producirlas. Los genes de este pez tienen los niveles más altos de proteínas anticongelantes que se han visto.

Como si fuera poco, se investigaron las proteínas anticongelantes solo después de encontrar otra de sus habilidades excepcionales: la biofluorescencia. Este pez caracol brilla en verde y rojo.

Pero los autores advierten que estos peces podrían enfrentar una amenaza en el futuro. ¿Cuál? La de siempre. El calentamiento del océano debido al cambio global de la temperatura.

«Así como el anticongelante en su automóvil evita que el agua en su radiador se congele en temperaturas frías, algunos animales han desarrollado una maquinaria increíble que evita que se congelen, como las proteínas anticongelantes, que evitan que se formen cristales de hielo», dijo el coautor David Gruber.

«Ya sabíamos que este pequeño pez caracol, que vive en aguas extremadamente frías, producía proteínas anticongelantes, pero no nos dimos cuenta de cuán repleto de esas proteínas está, y la cantidad de esfuerzo en hacer estas proteínas.»

Las proteínas anticongelantes se descubrieron por primera vez en peces antárticos en un estudio de 1971. Desde entonces se ha descubierto que estas proteínas han evolucionado de forma independiente en organismos diferentes. Desde bacterias hasta plantas, líquenes, insectos y vertebrados.

El hallazgo destaca cuán importantes son las proteínas anticongelantes para la supervivencia del pez caracol, pero también levanta una bandera roja sobre las apuestas de su futuro en un mundo que se calienta.

.-