Lanzan una campaña para limpiar de basura el Everest
Unas 57.000 personas acuden todos los años a la
región del Everest, lo que ha convertido el ascenso a esta emblemática montaña
en una auténtica romería. Además, esta acumulación de alpinistas está dejando a
su paso un grave problema medioambiental: la proliferación de residuos. Ahora,
una iniciativa liderada por destacados alpinistas y con el apoyo del Gobierno
de Nepal quiere acabar con la plaga de basura que invade el Everest y sus
alrededores.
El programa es impulsado por la empresa de
ingeniería medioambiental The NeverRest Project y cuenta con ingenieros,
técnicos, biólogos y climatólogos. Pero también hay destacados alpinistas de la
talla de Kilian Jornet, Tamara Lunger, Alex Txikon, Simone Moro o el nepalí
Lakpa Nuru Sherpa.
"Tras más de cuarenta años de expediciones
comerciales y abandono de residuos en la zona", desde The NeverRest
Project aspiran a limpiar el Everest en cinco fases, que van desde la
evaluación del impacto del turismo hasta una batida para limpiar el monte en su
lado nepalí, que llevarán a cabo especialistas locales e internacionales.
"El Sagarmatha Pollution Control Committee, la
ONG encargada por el Gobierno nepalí de monitorear los residuos y gestionar
medioambientalmente el Parque Nacional del Sagarmatha -la región del Everest-,
afirmó en su memoria anual que entre 2019 y 2020 había retirado unas 7,5
toneladas de basura de expediciones en la zona de Khumbu -fueron 60 toneladas
entre 2017 y 2018-, y más de 165 toneladas de residuos de Namche, Lukla y
alrededores -251 toneladas entre 2018 y 2019", ha recordado The NeverRest
Project, según recoge la agencia Efe.
Desde esta organización se muestran críticos con la
masificación del turismo, una de las amenazas a este ecosistema, junto con la
crisis climática y de biodiversidad que acucian al planeta en su conjunto.
"Cada año llegan nuevas expediciones y
trekkings a la zona del Everest que provocan que la situación se perpetúe, pese
a que cada temporada se realizan campañas de retirada de residuos y labores de
reciclaje con compañías asentadas en el territorio", advierten.
Según el IUCN World Heritage, el departamento
dedicado al patrimonio mundial de la Unión Internacional para la Conservación
de la Naturaleza, entre los años 2014 y 2016 el nivel de visitas anuales
promedio a la región del Everest fue de 30.000 personas, mientras que entre
2018 y 2019 la cifra ascendió a 57.000, es decir que el turismo casi se duplicó
en sólo tres años.
En el verano de 2022, la campaña Mountain Clean-up
que llevó a cabo el Ejército nepalí retiró un total de 33.877 kilos de basura
de las laderas del Everest, el Lhotse, el Manaslu y el Kangchenjunga, montaña
en la que recuperaron también dos cuerpos, han apuntado desde The NeverRest
Project, que ahora quieren realizar expediciones para conocer la dimensión
"real" de este problema ambiental, ante la falta de datos.
"La globalización, las crisis económicas y
sociales, y la vida en tiempos cambiantes e inciertos provocan la proliferación
de beneficios cortoplacistas que no sólo no benefician, sino que impactan
negativamente en nuestro sistema económico y social", han incidido en el
comunicado.
Su iniciativa también pretende crear un "campo
base sostenible" desde el que se puedan gestionar los residuos del
Everest, así como poner en marcha programas educativos de concienciación que
den visibilidad a los especialistas nepalíes.
Por su parte, Dhananjay Regmi, director ejecutivo
del Nepal Tourism Board, entidad dependiente del Gobierno nepalí, ha aseverado
en el escrito que "todo el mundo habla de montañas y turismo
sostenible" y "Nepal también se enfrenta a este problema y esta
pregunta siempre está cuando promovemos las montañas para las actividades
turísticas", por lo que "es el momento de pensar juntos para
encontrar soluciones permanentes".
,.
Comentarios
Publicar un comentario