¿Un OVNI gigante captando energía del Sol?
En 2012, apareció en YouTube un extraño vídeo, en el que podía verse una misteriosa y gigantesca esfera negra "conectada" al Sol por medio de una serie de oscuros filamentos. La esfera fue visible durante casi 80 horas, desde el 9 al 12 de marzo, y cuando desapareció dejó tras de sí una serie de llamaradas solares que no se calmaron hasta casi seis horas después. La fuente de esas espectaculares imágenes no dejaba duda sobre su autenticidad: habían sido obtenidas, ni más ni menos, que por el Observatorio de Dinámica Solar (SDO) de la NASA, quizá el más sofisticado de todos los satélites con los que la Ciencia estudia el comportamiento del astro rey.
Por supuesto, la noticia no tardó en
difundirse por la red. Apenas un par de días después, centenares de páginas
hablaban ya sin reparos del extraño objeto que "chupaba energía" de
nuestra estrella particular. Algunas de esas páginas, e incluso algún que otro
programa de televisión, publicaron el vídeo hablando de "un gigantesco
ovni mayor que la Tierra extrayendo energía directamente del Sol".
La esfera, eso es cierto, era enorme,
incluso más grande que Júpiter, el planeta gigante del Sistema Solar, que
multiplica por 317 la masa de la Tierra y por once su circunferencia. No cabe
duda de que la esfera negra fue algo realmente espectacular.
Pronto, otras "teorías"
empezaron a inundar la red, y junto al ovni gigante, preludio inequívoco de una
inminente invasión de la Tierra, surgieron otras interpretaciones de carácter
más "científico". Entre ellas, que se trataba de un agujero negro que
estaba empezando a devorar al Sol, o de un enorme planeta errante que le había
pasado rozando.
Intrigado por el vídeo, decidí acudir
directamente a la fuente de la que procedía y comprobar por mí mismo si la
esfera existió realmente o si, por el contrario, se trataba de la broma de
algún gracioso. Así que utilicé diversas webs oficiales para comprobar los
datos y las imágenes del Sol obtenidas durante esos días (con distintos
filtros, para no dejar lugar a dudas) por el SDO. Y pude comprobar que la
esfera, o lo que parecía ser una esfera de color negro, estuvo realmente ahí.
El paso siguiente fue comprobar si algún
otro satélite de observación solar había podido captar el extraño objeto. Acudí
a SOHO y a STEREO, otros dos sofisticados satélites de observación solar, y
resultó que ambos tenían, desde otros ángulos, imágenes y vídeos del extraño
fenómeno.
Comprobada sin lugar a dudas la
autenticidad de la esfera, quedaba por averiguar de qué podía tratarse, y de
paso la razón por la que la NASA no había hecho pública ninguna información o
comunicado al respecto. La respuesta me llegó, de nuevo, del propio SDO.
Solicité un análisis de los datos obtenidos por el satélite entre el 11 y el 12
de marzo y encontré que, justo en el punto donde había aparecido la esfera, el
instrumento AIA (Atmospheric Imaging Assembly) había detectado la aparición de
un "agujero coronal", es decir, un área en la que la corona solar (la
capa exterior del Sol) es más oscura y fría y tiene menos densidad de plasma
que en el resto.
Así que era eso… Los científicos que
estudian el Sol conocen de sobra el fenómeno, que está perfectamente
documentado. Se trata de una especie de hueco transitorio en el plasma solar,
que se conecta a la superficie por medio de un vórtice de filamentos y que,
además, suele estar asociado a una eyección de masa coronal (CME), esas nubes
ardientes de materia que el Sol expulsa en periodos de actividad máxima y que,
cuando llegan a la Tierra, pueden provocar averías en los satélites y en los
sistemas eléctricos y de comunicaciones.
Los agujeros coronales también se pueden
producir poco antes de una tormenta solar y, cuando se forman en el borde de la
corona, son perfectamente visibles ya que su perfil destaca contra el fondo
negro del espacio. En esta página se pueden ver imágenes de varios agujeros
coronales, muy parecidos al que se produjo el pasado 12 de marzo. No resulta
extraño, pues, que la NASA no hiciera comunicado alguno sobre un fenómeno menor
y que se produce con tanta frecuencia…
Llegados a este punto, me quedaba solo por
comprobar si, efectivamente, el pasado 12 de marzo se había producido en ese mismo
punto alguna llamarada solar. Y, efectivamente, así fue. Se trataba, además, de
una de las tormentas que causaron las CME que hace un par de semanas hicieron
correr ríos de tinta en todo el mundo, ya que causaron problemas en algunos
sistemas eléctricos de Asia.
En el vídeo bajo estas líneas se puede ver
con todo detalle la llamarada del pasado día 12. Y cómo ésta surge exactamente
del mismo lugar en el que se encontraba la "misteriosa" esfera negra.
No hubo, pues, ni ovnis gigantes, ni
agujeros negros, ni planetas errantes… Sólo un fenómeno natural que, a pesar de
ser habitual entre los científicos, es poco conocido por el público en general.
Hay que tener en cuenta que el SDO es relativamente nuevo (apenas si tiene dos
años) y que el nivel de detalle que pueden alcanzar sus instrumentos puede
confundir a los observadores no expertos.
Quizá esa sea precisamente la razón de que
últimamente en internert se estén multiplicando los vídeos sobre "extraños
objetos alrededor del Sol". De hecho, casi todos ellos proceden de los
datos de ese mismo satélite.
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