Descubren un océano agua dulce atrapado bajo Sicilia a 2.500 metros de profundidad desde hace seis millones de años
Un vasto acuífero de agua dulce ha sido descubierto
bajo los montes Ibleos en Sicilia, a profundidades que oscilan entre los 700 y
2.500 metros. Este descubrimiento, fruto de una colaboración entre
investigadores de Malta e Italia, podría ser la clave para mitigar la creciente
escasez de agua en la región del Mediterráneo.
El estudio, publicado en la revista Communications
Earth & Environment, detalla cómo este acuífero contiene una “extensa masa
subterránea de agua dulce y salobre”. Lorenzo Lipparini, investigador del
Instituto de Geofísica y Vulcanología de Italia (INGV), destaca la importancia
de estos recursos de aguas subterráneas profundas, que representan una fuente
potencial de agua no convencional capaz de satisfacer las crecientes
necesidades globales, especialmente en un contexto de aumento de la población
mundial.
El método innovador utilizado para este
descubrimiento combina el análisis de pozos petroleros profundos con técnicas
avanzadas de modelado tridimensional del subsuelo. Esta técnica no solo ha
permitido identificar el acuífero en Sicilia, sino que también abre la puerta a
la posibilidad de encontrar reservas similares en otras partes del
Mediterráneo. Lipparini sugiere que este enfoque podría aplicarse en regiones
como Marruecos, Túnez, Egipto, Líbano, Turquía, Malta y Chipre, todas ellas
caracterizadas por la escasez de agua y condiciones geológicas similares.
El potencial de estas aguas descalcificadas es
inmenso. Podrían ser utilizadas para el consumo potable, así como para usos
industriales y agrícolas, diversificando así las fuentes de agua disponibles y
aliviando la presión sobre los recursos hídricos convencionales. Este
descubrimiento no solo tiene implicaciones para la sostenibilidad del agua en
la región, sino que también podría transformar la gestión de los recursos
hídricos a nivel global.
La investigación ha reconstruido un evento geológico
ocurrido hace aproximadamente 6 millones de años, cuando el nivel del mar en la
cuenca del Mediterráneo oriental descendió hasta 2400 metros por debajo del
nivel actual. Este descenso creó condiciones favorables para la infiltración de
agua meteórica, permitiendo la acumulación y conservación de este valioso
recurso hídrico subterráneo. Este hallazgo no solo arroja luz sobre la historia
geológica de la región, sino que también subraya la importancia de comprender
los procesos naturales que han dado forma a nuestros recursos actuales.
El equipo de investigación, que incluye a expertos
de la Universidad de Malta y de la Universidad de Roma Tre, está entusiasmado
con las posibilidades que este descubrimiento abre para futuras
investigaciones. La combinación de técnicas avanzadas y la colaboración
internacional han sido clave para este éxito, y se espera que continúen
explorando otras áreas del Mediterráneo en busca de más acuíferos subterráneos.
Comentarios
Publicar un comentario