Rusia prepara la construcción de su nueva estación espacial: 34 cohetes harán realidad este proyecto
Rusia abandonará la Estación Espacial Internacional
(ISS, por sus siglas en inglés) en 2028. Esta decisión del país ruso viene dada
por la apuesta de construir una estación espacial propia, la famosa Estación
Orbital Rusa (ROS, por sus siglas en ruso) que se pondrá en órbita dentro de
cuatro años.
Tal y como está previsto, dicho laboratorio orbital
será controlado en su totalidad por la agencia Roscosmos, operará en una órbita
heliosíncrona de 400 kilómetros de altitud, permitirá la monitorización de toda
la superficie de la Tierra, se colocará en una órbita de latitud alta con una
inclinación de 97 grados, y el primer módulo científico-energético se lanzará
en el cuarto trimestre de 2027 gracias a los cohetes portadores que Rusia tiene
preparados.
Vladímir Kozhévnikov, director general del proyecto
de ROS, afirmó en el festival Naúka que, para construir esta infraestructura
espacial, Rusia lanzará un total de 34 cohetes portadores desde 2027 hasta
2033: "El primer lanzamiento está previsto para 2027. En 2028 se lanzarán
dos módulos más con un solo portador: el nudo de acoplamiento y la
esclusa".
Concretamente, en total, para completar la
construcción de la Estación Orbital Rusa, serán lanzados 15 cohetes Angará-A5M
y 19 vehículos espaciales Soyuz-2.1b. Asimismo, según Kozhévnikov, el primer
vuelo tripulado a ROS se efectuará en 2028 y, tras ello, en la primera fase de
construcción, hasta 2030, se añadirá un módulo interconectador, una esclusa y
el módulo base. Por último, entre 2031 y 2033, se planea ampliar ROS con dos
módulos de tareas específicas.
En un principio, se espera que la Estación Orbital
Rusa empiece a estar lista a partir de 2027 con las siguientes características:
capacidad de generar más energía para tareas específicas, unificar los módulos,
interaccionar con futuros grupos de satélites y ejecutar varios modos de
operación. Además, brindará una vista más amplia de la Tierra para fines de
monitoreo y vigilancia, e incluso no contará con presencia humana de manera
permanente.
Rusia anunció, hace dos años, que dejaría de operar
en la Estación Espacial Internacional tras cumplir con todas sus obligaciones
en 2024, además, a raíz del conflicto bélico con Ucrania, el país amenazó en
varias ocasiones con retirarse de este puesto avanzado que orbita la Tierra a
unos 400 kilómetros de altura.
Esta decisión requirió un compromiso financiero que
el gobierno ruso no mostró para las hazañas espaciales existentes del país,
teniendo en cuenta que, mientras tanto, Estados Unidos empezó a buscar un nuevo
socio para sustituir a Rusia, debido a que la estación está diseñada de tal
manera que los socios dependen unos de otros —es decir, el lado estadounidense
de la ISS proporciona energía, mientras que el lado ruso otorga propulsión y
evita que la plataforma caiga a la Tierra—.
Sin embargo, después de varios tira y afloja por
parte de Rusia, este país al final cambió de opinión y se comprometió a seguir
formando parte del proyecto hasta 2028 hasta construir su propia estación.
.-
Comentarios
Publicar un comentario