Alarma planetaria por la pérdida de oxígeno
Una investigación revela que más del 80% de los lagos del mundo han perdido oxígeno de forma alarmante en las últimas décadas, amenazando la biodiversidad acuática y acelerando los efectos del cambio climático
Los científicos alertan sobre una situación crítica que afecta a miles de
lagos en todo el mundo: la pérdida acelerada de oxígeno disuelto en el agua,
un fenómeno que pone en jaque a los ecosistemas acuáticos y que ya ha alcanzado
al lago más grande del planeta, el mar Caspio. Según un reciente estudio
publicado en Science Advances, liderado por el geógrafo Yibo Zhang,
de la Academia China de Ciencias, esta tendencia podría reducir el oxígeno en
los lagos hasta en un 9% a finales de siglo si no se actúa con urgencia.
El calor y las algas,
enemigos silenciosos
La investigación analizó 15.535 lagos con una superficie igual o
superior a 10 km² empleando datos satelitales, registros climáticos y
variables geográficas. El resultado es contundente: más del 80% presentan
una reducción significativa en los niveles de oxígeno. El principal
culpable es el calentamiento global, que contribuye en un 55% a esta
pérdida, al reducir la capacidad del agua para retener oxígeno disuelto.
Otros factores también agravan el problema. Las olas de calor, que
han aumentado en el 85% de los lagos estudiados entre 2003 y 2023,
suponen un 7,7% del impacto total. Además, la proliferación de algas,
favorecida por fertilizantes y vertidos cercanos a cursos de agua, añade un 10%
más a la pérdida de oxígeno, creando zonas muertas donde ya no puede
sobrevivir la fauna ni la flora.
Ecosistemas en riesgo
y biodiversidad amenazada
Las consecuencias de esta reducción son graves. La falta de oxígeno genera zonas
anóxicas, espacios donde no puede desarrollarse vida. Esto altera
profundamente los ecosistemas, afectando a peces, invertebrados, plantas
acuáticas y a toda la cadena trófica. Además, al morir la vida vegetal y
animal, se intensifica la emisión de gases como el metano, lo que retroalimenta
el cambio climático.
El mar Caspio, gran
símbolo de la alerta global
El caso del mar Caspio, el lago más grande del mundo, es
especialmente preocupante. Sus niveles de oxígeno han caído drásticamente, lo
que lo convierte en un símbolo global de la urgencia climática. Aunque
la mayoría de los estudios previos se centraban en los océanos, este nuevo
trabajo muestra que los lagos están perdiendo oxígeno hasta nueve veces más
rápido, lo que los convierte en un punto crítico del cambio climático.
¿Qué se puede hacer?
Los expertos coinciden en que detener el calentamiento global es la
única vía para revertir esta tendencia. Esto implica reducir emisiones,
fomentar energías limpias y limitar el uso de fertilizantes y contaminantes
cerca de masas de agua. Proyectos innovadores, como algas capaces de capturar
CO₂ o reactores que atrapan emisiones industriales, ya están en desarrollo y
podrían ser claves.
La investigación deja un mensaje claro: proteger los lagos del planeta
es proteger también la vida en la Tierra. El tiempo corre, y la ciencia ya
ha encendido todas las alarmas.
Comentarios
Publicar un comentario