Hallan un diente de megalodón en los restos del Titanic
El hundimiento del Titanic ocurrió en 1912, pero los
secretos que esconde siguen saliendo a la luz más de un siglo después. En este
sentido, un collar hecho con un diente de un megalodón ha sido descubierto esta
semana entre los restos del barco.
El hallazgo lo ha comunicado la empresa Magellan,
con sede en la isla de Guernsey, que ha llevado a cabo el primer escaneado
digital a tamaño real del lujoso transatlántico. Para ello, se han utilizado
dos submarinos con los que se han captado 700.000 imágenes del pecio, que luego
se convirtieron en un escáner en movimiento.
Así, las imágenes lograron captar un collar hecho
con un diente de un megadolón, un tiburón prehistórico, y con joyas de oro
incorporadas. Y aunque no se trata del 'Corazón del Mar' que fue lanzado al mar
en la película Titanic, este descubrimiento ha llamado la atención de los
investigadores que han examinado los restos del barco.
A pesar de la existencia de este collar, un acuerdo
entre Reino Unido y EE UU impide llevarse cualquier pieza del barco o de lo que
le rodea. Por esta razón, el equipo de Magellan no podrá acceder y coger el
collar para investigar más sobre el mismo.
No obstante, la empresa quiere saber más y conocer
su propietario así cómo sus posibles herederos. Para ello, está utilizando
inteligencia artificial con el fin de localizar y ponerse en contacto con los
familiares de los 2.200 pasajeros que iban a bordo del Titanic cuando se
hundió.
Además, están utilizando la tecnología para analizar
las imágenes de los pasajeros cuando embarcaban, con sistemas de reconocimiento
facial y para identificar la ropa que llevaban.
Richard Parkinson, director general de Magellan,
describe el hallazgo como "asombroso, bello e impresionante".
"El equipo cartografió el campo con tal detalle que pudimos distinguir
esos detalles", ha añadido.
La investigadora local del Titanic, Mandy Le
Boutillier, ha afirmado que la calidad de las imágenes creadas no se había
visto nunca antes. "Es escalofriante ver objetos como un par de zapatos,
porque allí hubo una vez un cuerpo. Te hace pensar: todo el mundo habla de que
el Titanic era un maravilloso barco de ensueño, pero en el fondo es una tumba",
ha destacado.
Por su parte, Jan Eliassen, que capitaneaba el MV
Freja cuando se tomaron los escáneres, ha declarado que fue emocionante
participar en el proyecto. "No creo que se pueda entender realmente lo que
se siente en la oscuridad de la noche, cuando el barco en el que estás se hunde
debajo de ti y entra en el agua", ha considerado.
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