Una mujer argentina lleva su perro a una carnicería y pide que lo sacrifiquen para comérselo
En un acto que ha conmocionado a usuarios de redes
sociales, un grupo de activistas logró salvar a Tobías, un alegre golden
retriever de 9 años, de ser sacrificado por su propia dueña. El incidente tuvo
lugar cuando la mujer, de 51 años, acudió a una carnicería ubicada en la
comunidad de La Plata, Argentina, con la intención de solicitar que
sacrificaran a su mascota para luego consumirla.
Según relatos de testigos presenciales, la mujer
consultó a los empleados del establecimiento si estaban dispuestos a matar al
animal, que se encontraba en buen estado de salud, alegando que le quedaba poco
tiempo de vida y que quería prepararlo para su consumo. Sin embargo, este
pedido alertó a los vecinos y a grupos de proteccionistas de animales de la
zona, quienes de inmediato se movilizaron para impedir las intenciones de la
mujer.
Con la intervención de efectivos policiales y
rescatistas, Tobías fue resguardado y puesto a salvo de su propietaria.
Asimismo, parte de este rescate fue registrado en video por uno de los vecinos,
provocando una ola de indignación en las redes sociales al difundirse
ampliamente.
Lo que más sorprendió a los presentes fue que la
mujer admitió su intención de sacrificar al animal, justificándolo como una
supuesta "costumbre de campo" heredada de su familia. Ante el
cuestionamiento de los rescatistas, la mujer declaró que no comprendía cuál era
el problema y detalló el proceso de faenado, equiparándolo al de otros animales
como vacas o caballos.
Durante el rescate, la dueña de Tobías mostró
indiferencia ante la situación, incluso llegando a manifestar que el perro
"hacía buena caca" y que "tenía buenos dientes", argumentos
que causaron repudio entre los activistas. Finalmente, Tobías fue trasladado a
la comisaría local, donde se radicó una denuncia por maltrato animal tanto
contra la mujer como por el intento de sacrificio del can.
Cabe destacar que el incidente ha reavivado el
debate en Argentina sobre la necesidad de endurecer las penas por maltrato y
crueldad animal, coincidiendo con la evaluación de una posible ley conocida
como Ley Conan, en memoria del fallecido perro del presidente Javier Milei, que
busca aumentar las sanciones para este tipo de delitos.
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