¿Los agujeros negros esconden la puerta hacia otros universos? Una teoría desafía todo lo que sabemos del cosmos

 

Desde hace décadas, los agujeros negros han sido uno de los mayores misterios del universo, conocidos como "devoradores cósmicos" por su capacidad de absorber materia y luz. Sin embargo, una teoría reciente sugiere que podrían ser mucho más que simples sumideros: estos enigmáticos objetos podrían actuar como portales hacia otros universos, ofreciendo una perspectiva revolucionaria sobre el origen y la estructura del cosmos.

El físico Nikodem Poplawski ha planteado la idea de que los agujeros negros no son el destino final de la materia que consumen, sino que, en realidad, podrían funcionar como puentes de Einstein-Rosen, también conocidos como agujeros de gusano, conectando distintos universos. Según su teoría, presentada en la revista Physics Letters B, estos portales cósmicos serían posibles gracias a una fuerza hipotética conocida como "torsión cosmológica", que permitiría a la materia atravesar estas conexiones interdimensionales en lugar de descomponerse en un punto de densidad infinita, conocido como singularidad.

Poplawski visualiza el universo como una red interconectada de túneles espacio-temporales, donde los agujeros negros actuarían como puertas hacia otras realidades. En lugar de ser el punto de “no retorno” en el que todo lo que atraviesa el horizonte de sucesos queda atrapado sin salida, los agujeros negros serían los nexos entre múltiples dimensiones, tal vez incluso el origen de nuestro propio universo. Este concepto abre una puerta a una cosmología completamente nueva, donde el Big Bang podría ser el resultado de uno de estos "puentes" cósmicos que conectan diferentes universos.

Simulaciones recientes de agujeros negros en laboratorios, junto con observaciones astronómicas, han demostrado que aún hay mucho por descubrir sobre el comportamiento de estos fenómenos. En algunos experimentos, los resultados han mostrado características inesperadas, desafiando los modelos convencionales y dando indicios de que los agujeros negros podrían funcionar de maneras que apenas comenzamos a comprender. Recientemente, el descubrimiento de un agujero negro relativamente cercano a la Tierra ha vuelto a poner en el foco a estos fascinantes y desconcertantes objetos, subrayando cuánto desconocemos sobre su naturaleza.

Aunque la idea de los agujeros negros como portales interdimensionales es una hipótesis que aún debe ser probada, representa un cambio de paradigma que reta a los científicos a reconsiderar las bases de la cosmología actual. Si se confirma, significaría que nuestro universo visible es solo una pequeña parte de una vasta red de realidades interconectadas. La posibilidad de que el Big Bang haya surgido de uno de estos portales podría redefinir completamente nuestra comprensión de los orígenes del cosmos y nuestra posición en el vasto entramado de múltiples universos.