Crean fondo para honrar a Eko, el tigre malasio muerto por un disparo en un zoo de Florida

 

Horas después de que recibiera un disparo mortal para que soltara el brazo de un hombre imprudente, el Zoológico de Naples, en Florida, decidió este jueves 30 de diciembre que honrará la memoria del tigre malasio Eko con un fondo para salvar su especie, en peligro de extinción en el país asiático.

En la página web del zoológico, donde se aclaran dudas sobre los trágicos hechos ocurridos por primera vez en sus 52 años, se informa que el 100 por ciento del Fondo de Conservación del Tigre Eko será destinado a ayudar a salvar a los tigres en Malasia, apoyando los esfuerzos de la Sociedad de Conservación de la Vida Silvestre.

Desde el zoo señalaron que la decisión de cerrar este jueves las instalaciones fue para que se realizaran las investigaciones de lo ocurrido la noche anterior, así como permitir que el personal procese la pérdida. Este viernes 31 de diciembre retomarán las actividades cotidianas, a partir de las 9:00 a.m.

De acuerdo con el zoológico, después de que cerraran las puertas al público el miércoles 29 de diciembre, River Rosenquist, de 26 años, empleado de un servicio de limpieza externo “saltó una valla, en un espacio no autorizado, frente al hábitat del tigre malasio”, queriendo acariciar o alimentar al animal, a través de la verja.

“Nuestro agente hizo todo lo que pudo en esa situación y finalmente tomó la única decisión posible que pudo para salvar la vida de este hombre”, dijo el alguacil del condado de Collier, Kevin Rambosk.

Según la pesquisa preliminar, la empresa de limpieza es responsable de limpiar los baños y la tienda de regalos, pero no los recintos de los animales.

Tras ser rescatado, Rosenquist fue hospitalizado en el Lee Memorial, donde se mantiene recibiendo tratamiento.

Eko era un tigre de 8 años que nació en el Zoológico de Little Rock, el 12 de noviembre de 2013, como parte del Programa de Supervicencia de Especies, coordinado por la Asociación de Zoológicos y Acuarios. Su llegada al zoológico de Naples ocurrió el 4 de diciembre de 2019, procedente del Zoológico de Woodland Park.

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