Jeff Williams, el astronauta que cree en Dios
La ciencia siempre fue un tema fascinante para Jeff
Williams, quien logró alcanzar mucho más allá de sus sueños como astronauta
gracias a su fe en Jesús.
Con una notable carrera en el ejército y más tarde
como astronauta, Williams pasó 534 días en el espacio logrando una proeza, pero
su vida no siempre tan exitosa como el público piensa, pues llegó a Cristo
junto a su esposa en un momento duro para ambos. Su familia desde que él estaba
pequeño se identificaba como cristiana, pero nunca asistían a la iglesia.
“A solas, asistí a una clase de confirmación con un
pastor luterano local. En esa etapa de mi vida, tenía muchas preguntas sobre la
fe y la Biblia . Y recuerdo que fue un año muy profundo para mí”, dijo.
«Asistir a la clase de confirmación fue algo que
hice por mi cuenta. No estaba en el contexto de mi familia. Y después de la
clase, mi fe se detuvo cuando entré a la escuela secundaria. Así que siempre he
tenido muy poca participación en una iglesia, sin embargo, ese año tomé el
curso de confirmación», agregó. Su esposa, Anne-Marie fue criada como católica
no practicante, pero no fue sino hasta una crisis en su matrimonio que ambos
ejercieron la fe verdadera en Cristo después de 7 años de casados. «Dios ha
puesto cristianos a nuestro alrededor», dijo él sobre su carrera militar y la
conversión de su esposa a Cristo.
«Así que pasé los siguientes meses tratando de
entender lo que le sucedió estudiando las Escrituras. Estudié el Evangelio de Juan
y la carta a los Romanos, principalmente», relató.
Su esposa fue el impulso principal para que el
astronauta comenzara a buscar a Jesús a través de sus lecturas bíblicas
diarias, hasta que un día me pidió que oraran por él pues quería darle su vida
a Cristo. «Un día le pedí que viniera a Alabama para un fin de semana largo en
enero de 1988. Y le pedí que me ayudara a orar para entregarle mi vida a Cristo
ese fin de semana», detalló Williams.
«Y fue entonces cuando comenzamos a reconstruir
nuestro matrimonio y cómo criamos a nuestros hijos y cómo abordamos la vida
como un todo», confesó. «Cristo cambió completamente mi vida. En lugar de vivir
para mí y sin un propósito mayor, ahora tenía un propósito para mí y mi
familia”, dijo Williams. «Me di cuenta, a través de una mayor conciencia y
comprensión del llamado en la vida, que fuimos creados con un propósito , y ese
propósito es servir a Dios y a los demás. Así que este ha sido un cambio
profundo en mi enfoque de la vida», agregó.
Para 1996, ya tenía una fe cimentada en Cristo y fue
cuando fue seleccionado como astronauta desde la Escuela de Pilotos de Prueba
Naval de EE.UU; Williams dijo que sabía que la ciencia y la fe no estaban en
conflicto. «Cuando me seleccionaron para ser astronauta, sabía que surgirían
muchas preguntas. Por lo tanto, dediqué mucho tiempo y esfuerzo a estudiar el
material para abordar estas preguntas y, por ejemplo, el aparente conflicto
entre la teoría de la evolución y todas las filosofías asociadas», confesó.
«Desde principios de la década de 1990, he estado
investigando esta área debido a las preguntas que sabía que recibiría, las
preguntas que sigo recibiendo y las solicitudes que recibo para hablar sobre el
tema», añadió. El astronauta tiene su propio récord de días en el espacio, pero
lo ma importante para él fue la experiencia y como pudo observar de primera
mano la creación de Dios en el espacio, algo que la ciencia niega.
Su libro titulado «El trabajo de sus manos: una
vista de la creación de Dios desde el espacio» relata sus observaciones durante
las más de 2.800 órbitas alrededor de la Tierra y el hecho de que tomó más
fotografías del planeta que cualquier otro astronauta en la historia; la
descripción del libro dice que cada escena representada contiene lecciones sobre
la creación de Dios.
Jeff rechaza la idea absoluta de que la ciencia es
lo que hace progresar a la humanidad y que la Biblia hace retroceder a las
personas. «Incluso el término llamado ‘edades oscuras’, que en realidad no era
tan oscuro, es un término despectivo que respalda la tesis de que ‘la religión
en general, el cristianismo en particular, es regresiva, nos hace retroceder’.
Así que ese es el mayor desafío», explicó.
Existe un riesgo significativo para Williams, y es
el que no haya compromiso con la capacidad de comprender que la ciencia y la fe
coexisten, en dónde una es base de la otra.
«Considero que la Palabra de Dios es la autoridad
final. La Palabra de Dios es verdadera. Es la Palabra de Dios, el Creador de
todas las cosas y Aquel que sabemos que es nuestro Redentor. Así que se trata
de autoridad», expresó. «Solo tengo que hacer el trabajo para entenderlo,
extraer la verdad de él y aplicarlo al mundo que nos rodea. Si no tomas la
Biblia como autoridad, entonces la reemplazarás con otra cosa», finalizó. El
astronauta y su esposa sirven dentro de Word of Grace Bible Church, además de
tener un doctorado en Ministerio de The Master’s Seminary.
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