Detectan signos de vida geológica en Venus

Investigadores detectan señales de vida geológica en estructuras circulares del planeta que podrían ofrecer pistas sobre la juventud de la Tierra

Un reciente estudio publicado en la revista Science Advances sugiere que Venus podría tener actividad tectónica activa que está moldeando su superficie, desafiando así la antigua idea de que este planeta es completamente geológicamente inactivo. El hallazgo se basa en el análisis detallado de datos obtenidos hace más de tres décadas por la sonda espacial Magallanes de la NASA, y ha sido liderado por investigadores de la Universidad de Maryland, en Estados Unidos.

El foco del estudio son las llamadas coronas, grandes estructuras circulares u ovaladas de entre decenas y cientos de kilómetros de diámetro que se encuentran repartidas por la superficie venusiana. De las 75 coronas analizadas, en al menos 52 se han identificado indicios de material flotante procedente del manto interior del planeta, lo que apuntaría a la existencia de procesos de deformación similares a la tectónica, aunque sin placas tectónicas como en la Tierra.

Una geología activa sin placas tectónicas

A diferencia de nuestro planeta, Venus no presenta placas tectónicas móviles, pero los científicos sostienen que el calor interno y el material derretido del manto estarían empujando hacia la superficie, deformando estas coronas desde el subsuelo. Según los autores, este proceso implicaría que el planeta aún está geológicamente vivo.

El investigador principal del estudio, Gael Cascioli, ha explicado que estas formaciones podrían representar una etapa anterior a la tectónica moderna terrestre. “Las coronas no se encuentran hoy en la Tierra, pero pueden haber existido en sus primeros momentos, antes de que se establecieran las placas tectónicas”, afirma el científico.

Las estructuras analizadas incluyen coronas como Artemisa, Quetzalpetlatl, Bahet y Fotla, cuyos patrones de relieve sugieren una continua interacción entre el interior y la superficie del planeta.

Implicaciones para la comprensión planetaria

Este hallazgo no solo aporta nuevas pruebas de que Venus sigue cambiando internamente, sino que también proporciona una posible analogía con la Tierra primitiva, permitiendo comprender mejor cómo evolucionó la tectónica en nuestro propio planeta.

Además, refuerza el interés científico por futuras misiones de exploración al planeta vecino, como VERITAS de la NASA o EnVision de la ESA, previstas para la próxima década, que podrían ofrecer imágenes de mayor resolución y datos actualizados para confirmar esta actividad geológica.

 

Comentarios

Entradas populares