Space X podría reemplazar a Rusia en la Estación Espacial Internacional

 

Rusia confirmó que después de 2024 se retirará de la Estación Espacial Internacional (EEI) y varios inversores ya se están disputando el lugar que dejará vacante.

La salida de los rusos presentará una gran oportunidad ya que la NASA estaría obligada a apresurar la adjudicación a una empresa para que la Estación Espacial se mantenga en funcionamiento.

Aunque se trata de un esfuerzo multinacional que incluye elementos aportados por Estados Unidos, Rusia, Japón, Europa y Canadá, la mayor parte de la EEI pertenece a los norteamericanos. Pero uno de sus componentes más importantes es el módulo de servicio Zvezda, el motor de la estación que le permite mantener su órbita y maniobrar alrededor de la basura espacial.

La empresa de satélites de Elon Musk podría reemplazar a Rusia en la Estación Espacial Internacional

Cuando Rusia abandone la EEI, tiene la intención de llevarse sus módulos, entre ellos el Zvezda, para construir una estación espacial propia. Si la NASA y las otras agencias que construyeron la monumental nave desean mantenerla en funcionamiento, deberán sustituir su motor.

La principal opción, dada la urgencia y el alto presupuesto, es adjudicar la tarea a una empresa privada. Al momento, ya son tres los potenciales candidatos para el jugoso contrato que la NASA tiene preparado para la construcción del módulo de servicio necesario.

La solución provisional que encontró la NASA para mantener la EEI en funcionamiento durante unos años más es llamar a una licitación entre empresas norteamericanas para que una se encargue del tema.

Esto, además, va en línea con la política de la Agencia Aeroespacial de Estados Unidos de formar y capacitar a empresas privadas en la construcción de sus propias estaciones espaciales

Las empresas candidatas a ocupar un lugar en la Estación Espacial Internacional

A pesar de su confirmación, es difícil saber cuán serias son las intenciones de Rusia de abandonar la EEI. De todas maneras, la NASA ya empezó a moverse y a estudiar las opciones para construir el módulo que podría faltar que para que el laboratorio ubicado a unos 400 kilómetros de la superficie terrestre se mantenga en funcionamiento.

SpaceX

SpaceX es la primera empresa que podría ocupar el lugar que dejará Rusia en la EEI. La firma de Elon Musk ha demostrado que es capaz de resolver los diferentes problemas de la exploración espacial. Sus cohetes de lanzamiento y aterrizaje vertical reutilizables y sus satélites de comunicaciones son una muestra de la eficacia de la empresa. El problema es el retorno y beneficio que obtendría la empresa al hacerse cargo de esta tarea.

Boeing

La principal contratista de la NASA en la construcción de la EEI en las décadas de 1990 y 2000 es una gran candidata: probablemente conoce la Estación Espacial mejor que nadie. Además, Boeing ya dispone de su propia nave espacial, el Starliner, que es capaz de llegar a la EEI y de ser necesario podría acoplarse y usar sus motores para corregir el rumbo de la estación espacial mientras se trabaja en una solución más permanente.

Northrop Grumman

Al igual que el Starliner de Boeing, las naves de abastecimiento Cygnus de Northrop son capaces de llegar a la EEI. En el pasado, la propia NASA ya ha confesado que tiene planes para intentar utilizar los motores de la nave de Northrop Grumman para corregir el rumbo de la EEI en un futuro vuelo, y no descarta esta opción.

Por otra parte, Northrop ya obtuvo un contrato para construir un módulo habitable para la estación espacial lunar prevista por la NASA, el Lunar Gateway. Y si la NASA considera que Northrop está capacitada para construir módulos para su nueva estación espacial, es lógico que sea la primera en conseguir un contrato para construir nuevos módulos para la antigua estación espacial de la NASA.

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