Llega un fenómeno único: LA LUNA ROSA
El cielo nos trae esta primavera de 2023 una agenda
repleta de fenómenos: dos eclipses, conjunciones planetarias, estrellas
fugaces... Otra cita imperdible para los amantes de la astronomía es la luna
llena de abril, un plenilunio también conocido como Luna Rosa o Luna Pascual y
que tiene lugar el jueves 6 de abril.
Esta luna llena es la primera de la primavera, por
lo que también es la que marca las fechas de la Semana Santa. El Domingo de
Resurrección se sitúa cada año en el calendario en el primer domingo tras la
primera luna llena de primavera y a partir de esta fecha se establece el resto
de días de la Semana Santa. De ahí, que este plenilunio sea denominado Luna
Pascual.
La luna llena de abril también se conoce como Luna
Rosa, si bien su nombre no se debe a que ese día el satélite se asome con luz
rojiza. El 6 de abril se verá una luna completa, grande y muy luminosa, eso sí,
con su habitual brillo blanco y plateado. Si se llama así, es porque este
plenilunio coincide con el florecimiento de la planta silvestre phlox musgoso o
subulata, cuya flor sí puede adquirir tonos rosáceos.
El origen de las denominaciones de las lunas se
remonta a los nativos americanos del norte y este de los Estados Unidos,
quienes durante siglos bautizaron las lunas llenas con diferentes nombres,
evocando un hecho importante que coincide en cada mes. Así tenemos la luna
llena del lobo (enero), de la nieve (febrero), del gusano (marzo) o del
esturión (agosto), entre otras. En otros lugares del planeta, la luna llena de
abril también es bautizada como Luna del huevo, Luna de la semilla o Luna de
los brotes.
Atendiendo a los datos del Instituto Geográfico
Nacional, la luna llena de abril, la cuarta de las 13 lunas llenas de 2023,
tiene lugar el jueves 6 de abril bajo el signo de Libra, alcanzando su punto
máximo a las 6:34 horas. De esta manera, el mejor momento para disfrutar de la
Luna Rosa en todo su esplendor será la noche del miércoles al Jueves Santo.
El plenilunio sucede cuando la Tierra se sitúa en
línea recta entre el Sol y la Luna. En este momento, el disco lunar aparece
completamente iluminado y con un brillo muy intenso, haciendo posible localizar
los rasgos principales de la cara visible de la luna, como los mares y los
mayores cráteres, con mucha facilidad.
Para ver la luna llena no es necesario disponer de
telescopio, ya que basta con nuestros propios ojos para contemplar su mágica
iluminación, incluso pudiendo distinguir ciertos rasgos de su cara. Eso sí, el
uso de prismáticos permiten apreciar más detalles de su superficie.
Lo más importante será situarnos en un punto
elevado, sin obstáculos y en el que haya poca contaminación lumínica.
También será importante este mes de abril la lluvia
de estrellas de las Líridas .Esta lluvia de meteoros alcanzará su máxima
actividad en torno al 22 de abril, casi sin la Luna, pues el novilunio habrá
tenido lugar el día 20.
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