El increíble proyecto para crear energía infinita a través de un agujero negro lunar

El profesor Avi Loeb de Harvard ha propuesto una idea fascinante que amplía los límites de nuestra imaginación tecnológica: la posibilidad de que civilizaciones avanzadas utilicen agujeros negros como fuente de energía. Loeb es una eminencia en el campo de la astronomía, pero en ocasiones ha encontrado alguna que otra enconada resistencia ya que aboga de forma abierta por la posibilidad de la existencia de otras civilizaciones muy cerca de nosotros. En el pasado hemos hablado de algunos de sus estudios, como el de las esferas perfectas en el fondo del mar a las cuáles sus detractores consideraron que se restos creados por el hombre. Sin embargo, sus teorías son muy sugerentes, y esta, aunque realmente loca, sigue siendo interesante.

Su nueva teoría se centra en el concepto del Proceso Penrose, introducido por Roger Penrose en 1971, que sugiere cómo se podría extraer energía de un agujero negro en rotación. Resulta increíblemente interesante y la teoría del profesor Loeb se puede leer en un artículo disponible para pre-impresión en Arxiv.org.

La idea de Loeb implica un escenario donde un pequeño agujero negro, de apenas cien mil toneladas, orbita un planeta como si fuera una luna, pero siendo realmente un agujero negro. Este, aunque se evaporaría naturalmente en un año y medio debido a la radiación de Hawking, podría mantenerse alimentándolo constantemente con pequeñas cantidades de materia.

Lo más sorprendente de esta propuesta es su eficiencia energética. Loeb describe este sistema como el "motor más eficiente" imaginable, capaz de convertir masa en energía con una eficiencia del 100%. Teóricamente, podría suministrar 40 cuatrillones de vatios de energía de forma continua, superando con creces el consumo energético global actual que no llega ni a una pequeña cantidad de esa cifra. Sin embargo, como es lógico, implica una serie de cuestiones bastante complicadas de llevar a cabo en el plano real y hoy por hoy sería imposible de ejecutar

El agujero negro podría utilizar cualquier forma de materia, incluyendo desechos, lo que lo convierte en una solución potencial para la gestión de residuos a escala planetaria. Acabaríamos con todos los residuos del planeta y les daríamos un uso fundamental para seguir creciendo tecnológicamente. De acuerdo con Loeb, siguiendo el modelo de Kardashev de las civilizaciones extraterrestres, una civilización capaz de aprovechar toda la energía de su sistema estelar sería capaz de poner en práctica esta idea.

A ojos de los astrónomos este tipo de planetas con civilizaciones de este tipo serían muy fáciles de encontrar, aparecerían como planetas errantes que dejan una huella bastante notable de rayos gamma. De momento, todo esto no es más que una especulación que no se sale más allá de lo teórico, sí que es cierto que va a servir para expandir nuestra mente y entender mejor hacia dónde deberíamos proyectar nuestros esfuerzos como civilización.

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