El Pentágono revela que Estados Unidos ha rastreado 650 objetos inexplicables
Los objetos voladores no identificados, también
conocidos como ‘ovnis’, son un tema de investigación y discusión en el
Pentágono, la entidad del Ministerio de Defensa de Estados Unidos. Aunque
muchas personas crean que los ‘ovnis’ se refieren a encontrar vida
extraterrestre, un investigador aseguró que no hay evidencia creíble al
respecto.
El Dr. Sean Kirkpatrick, de la Oficina de Resolución
de Anomalías del Pentágono, explicó al Comité de Servicios Armados del Senado
que se siguen rastreando cientos de objetos voladores no identificados, pero
que la mayoría son ‘fácilmente explicables’.
“También debo dejar claro para que conste que en
nuestra investigación, AARO no ha encontrado evidencia creíble hasta el momento
de actividad extraterrestre, tecnología fuera del mundo u objetos que desafíen
las leyes conocidas de la física”, afirmó Kirkpatrick.
De acuerdo al investigador, se da prioridad a
analizar los objetos que hayan sido detectados a alturas muy elevadas. Durante
la audiencia con el Senado, Kirkpatrick mostró imágenes y videos de algunos
casos que están rastreando.
Kirsten Gillibrand, la presidenta del panel,
reconoció que sobre algunos objetos aéreos “no sabemos de dónde vienen, quién
los hizo o cómo funcionan”. Además, expresó su consternación porque ‘debido al
estigma OVNI la respuesta ha sido irresponsablemente anémica y lenta’.
Gillibrand se quejó de que la oficina no estaba
obteniendo los recursos que necesitaba y que “parecía que el liderazgo del
Pentágono no recurrió a la oficina de Oficina de Resolución de Anomalías para
desempeñar un papel de liderazgo” en el incidente del globo espía chino, uno de
los casos de un objeto volador más polémicos.
En eso estuvo de acuerdo Kirkpatrick, quien dijo que
necesitaba dar prioridad a aquellos basados en información de defensa en áreas
de “importancia para la seguridad nacional”.
“La mayoría de los objetos no identificados
informados a la Oficina de Resolución de Anomalías demuestran características
mundanas de globos, sistemas aéreos no tripulados, desorden, fenómenos
naturales u otras fuentes fácilmente explicables”, agregó. A pesar de la
frecuencia de los avistamientos, “los humanos están sujetos a engaños e
ilusiones, los sensores a respuestas inesperadas y fallas y, en algunos casos,
a interferencias intencionales”, dijo el investigador. (I)
.
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