Archivos desclasificados de la CIA apuntan a un contacto entre EE.UU. y extraterrestres en 1959
El encuentro se produjo en Nuevo México cinco años después de una primera comunicación por radio en binario
Recientes documentos
atribuidos a la CIA y supuestamente desclasificados están generando un
nuevo debate en torno a los posibles contactos del gobierno de Estados Unidos
con inteligencias extraterrestres. Según estas fuentes, el primer
contacto entre humanos y seres de otro mundo habría ocurrido en el año 1959,
a través del intercambio de señales codificadas en lenguaje binario, como parte
de una iniciativa conocida como Proyecto Sigma.
El contenido de estos
archivos sugiere que los extraterrestres respondieron a esas señales, lo
que desembocó en una reunión formal entre ambas partes en 1964, cinco
años después, en una ubicación del desierto de Nuevo México, la
misma región asociada históricamente con el incidente de Roswell en
1947.
Un encuentro secreto
con dos seres de otro mundo
La información,
publicada por el medio británico Daily Mail, sostiene que el encuentro
entre ambas razas fue breve y discreto, y que solo un oficial de las Fuerzas
Armadas estadounidenses representó a la humanidad, mientras que dos
extraterrestres participaron por parte de la otra civilización. La reunión,
según estos informes, se prolongó durante unas tres horas, en las que se
habrían intercambiado datos básicos sobre el origen, naturaleza e intenciones
de cada especie.
“El oficial de la
Fuerza Aérea logró intercambiar información básica con los dos extraterrestres”, se puede leer en uno de los documentos filtrados. Aunque el contenido
carece de validación oficial, su publicación ha reavivado el interés por las
teorías de contacto y las operaciones secretas relacionadas con vida
extraterrestre.
Negación oficial y
teorías persistentes
Desde el FBI,
sin embargo, han sido tajantes: estos documentos son falsos, aseguran, y
no hay constancia de que jamás se haya producido dicho contacto entre
Estados Unidos y seres alienígenas. La polémica se mantiene, alimentada por la
existencia de organismos ultra secretos, que, según apuntan algunos
analistas, actuarían al margen del propio conocimiento del FBI, la CIA o
incluso de altos niveles del Gobierno estadounidense.
Este nuevo capítulo se
suma al creciente número de testimonios, filtraciones y declaraciones que en
los últimos años han hecho que el fenómeno OVNI deje de ser solo una
curiosidad marginal, ganando presencia en foros científicos, mediáticos e
incluso parlamentarios, como ya ocurrió con las audiencias públicas sobre
fenómenos aéreos no identificados en el Congreso de Estados Unidos.
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